“Estados Unidos todavía conserva cierta capacidad para presionar a Zelaya y obligarlo a tomar en serio las negociaciones: no abandonar al gobierno de Micheletti ni privarlo de ayuda hasta no ver el resultado final de la mediación de Oscar Arias. Si Estados Unidos comprueba que el objetivo de Zelaya no es rescatar la legalidad, sino entronizar el chavismo, lo responsable es hacer lo posible por impedirlo. Nada complacería más a los hondureños. Nada sería más conveniente para Estados Unidos”.
Carlos Alberto Montaner