El reducto que los ingleses se negaron a cambiar por la Florida
jueves, 15 de abril de 2010
Trago amargo
“Muy probablemente, la salida de la tenebrosa situación actual de nuestra patria pase por acuerdos esenciales entre quienes nos oponemos al sistema y los que, aun postulando la necesidad de cambios sustanciales, manifiestan apoyarlo.
“Es posible que esto desagrade a algunos, tanto en un bando como en el otro, pero la noble idea de democratizar y hacer prosperar a Cuba bien merece que estemos dispuestos a apurar ese trago, aunque nos parezca amargo”.