por José Luis Sito
El próximo 27 de marzo será ocasión para que el régimen cubano comience los festejos y la diversión de la Bienal de Arte de La Habana. Fue precisamente en este mismo mes de marzo del año 2003, durante los días 18, 19 y 20, que la dictadura desató las acciones de represión y de terror de la Primavera Negra contra los disidentes. Esta coincidencia de datos no es una casualidad.
Aquí el calendario de cada edición de la Bienal desde sus inicios, en 1984:
1984 : mayo-junio
1986: 26 noviembre-31 diciembre
1989: 27 octubre-31 diciembre
1991: 16 noviembre-31 diciembre
1994: 6 mayo-30 junio
1997: 3 mayo-8 junio
2000: 17 noviembre 2000-6 enero 2001
2003: 1 noviembre-15 diciembre
2006: 27 marzo-27 abril
2009: 27 marzo-30 abril
A partir del año 2003, el castrismo modificó la fecha de inauguración de la Bienal, la cual -qué casualidad- coincide con la conmemoración de la Primavera Negra. Con esta operación el régimen totalitario trata de encubrir sus actos de represión. Esta táctica de diversión ya se había empleado entonces, cuando ordenaron aquellos encarcelamientos por los días en que empezaba la guerra de Irak.
La motivación que empuja el reajuste de calendario de este evento artístico parece ser, entonces, la de ocultar una mancha de infamia. Se origina en hechos que la dictadura trata de disimular, que han traído sufrimiento y privación de libertad para decenas de hombres inocentes.
Que los artistas presentes en esta edición traten de responder la siguiente pregunta: ¿Qué Bienal de Arte en el mundo está destinada a disimular un acto de represión de un gobierno?