El senador de origen cubano Mel Martínez (republicano), aseguró este miércoles en A Mano Limpia, del Canal 41 (local), que aun cuando las medidas tendientes a aliviar las restricciones al embargo tuvieran éxito en el legislativo estadounidense, no constituirían cambios radicales respecto a la política hacia Cuba.
“Estamos luchando Bob Menéndez y yo para que esas medidas no pasen, pero es impredecible. Aunque no creo que, en caso de aprobarse, signifiquen un cambio dramático de la política hacia Cuba”, insistió Mel.
“Los cambios dramáticos, si se verifican, los traerá el presidente Barack Obama, o vendrán de la propia secretaria de Estado, Hillary Clinton”.
A propósito de los sucesos en torno a la defenestración de Carlos Lage y Felipe Pérez Roque en Cuba, el representante no se anduvo por las ramas: “Es el raulismo rodeándose de militares de confianza, que no son las personas del cambio, ni las del aire fresco, porque son el pasado”.
Por último, el senador cubanoamericano estimó que Latinoamérica no será una prioridad para el gobierno de Obama. “Francamente, la situación de Cuba, y de la región, no están en el tablero de los problemas de primera instancia para Estados Unidos”.