Desde el 3 de julio, hasta hoy, en huelga de hambre. Antonio Ledezma, el alcalde de Caracas bajo acoso chavista, reclama la intervención de la Organización de Estados Americanos (OEA) ante la inestabilidad de la democracia venezolana.Interesante artículo de Heriberto Hernández en su blog pero, insisto, los artículos 239 y 374 de la Constitución Hondureña, por mencionar sólo un par de ejemplos, cesan automáticamente en su cargo a quien intente saltarse las normas. Otra cosa es si Zelaya debió ser expulsado del país o no, o si las formas fueron las adecuadas, pero el hecho es que constitucionalmente era ya un funcionario destituido cuando los militares fueron tras él. En el cumplimiento de la ley, para que una democracia funcione, es mejor ser radicales que moderados. Hay que agradecer a los hondureños, por encima de ciertas pifias puntuales -¿quién no las comete?-, que cumplieran lo establecido en la Carta Magna.
Más dinero circulante tras la huella de Zelaya.
Y el ex presidente de Ecuador, Lucio Gutiérrez, acusa al secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, de no haber rechazado su derrocamiento, el 20 de abril de 2005, por estar "vinculado ideológicamente con los golpistas", mientras ahora sí lo hace en Honduras “también por vinculación ideológica”.
