“Desde el primer momento, el propio día 28 de junio, rechazamos la violencia entre hermanos hondureños y la seguimos rechazando venga de donde venga esa violencia. Pero también llamábamos y seguimos llamando a que los hondureños puedan resolver pacíficamente, entre ellos, por la vía del diálogo, esta situación.
“El pueblo hondureño no necesita que los factores externos tomen partido por una u otra parte, porque eso sólo alienta la confrontación. Lo justo es alentar al entendimiento mediante el diálogo digno entre los mismos hondureños, que son los únicos que pueden superar pacíficamente y con justicia estos difíciles momentos”.
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