por Victoreto Junior
La intelectual franco-cubana Zoé Valdés se alzó con el título de Personalidad del Año de Nuevo Songo del Norte debido a que “representa la quintaesencia del islote, a cómo encarna los ideales de liberté, égalité y fraternité, y a su presencia permanente en la blogósfera como fuente de debate e inspiración”.
Considerada la “mujer más rica de Cuba” por la revista SongoFortune, la Valdés fue vista aparentemente celebrando el galardón en el exquisito restaurante parisino Kong, el lugar más à la mode para mirar y dejarse ver, y el sitio “más sexy” del agitado mundillo de la culinaria francesa.
Tocada con plumas rojas y ataviada con manto verdeamarillo, la Valdés degustaba ingentes cantidades de langosta al yuzu y suculentos hígados de ternera caramelizados, manjares rociados con champán y un excelente vino bordelais. Los postres de Pierre Hermé, el mejor dulcero del Tout Paris.
Supuestamente reaccionando sobre el premio, la Valdés --según la revista SongoWomen, una de las mujeres más influyentes de la historia junto a Cleopatra, Nancy Reagan y Rigoberta Menchú— espetó (aunque algunos dicen que esputó): “Que se jodan los chivatientes, envidientes y comepinguientes”.
Acto seguido, en una pausa de la pantagruélica ingesta, se dice que la respetada francófona reconoció: “Escribí una tronca de novela, y varias de ellas, gané mucho dinero, me hice rica”. Y remató a viva voz: “Requetepin$/*/&5$...”.
Este año, la Real Academia Novosongolesa honró a la pensadora con el Premio Borondongo de la Paz.