Mark Begich, senador demócrata por el Estado de Alaska, estuvo este fin de semana en la ciudad de Miami Beach, invitado por la Oficina del congresista republicano Lincoln Díaz-Balart, y sostuvo un encuentro con ex prisioneros políticos y personalidades del exilio cubano.En la reunión se abordaron temas relacionados con Cuba y, ante las preguntas del senador, los participantes dieron testimonio de la realidad dentro de la Isla, la represión del régimen, el incremento de la oposición y la sociedad civil y del cada vez más evidente descontento de la población.
En el encuentro participaron los ex presos políticos Ana Lázara Rodríguez, Manuel Vázquez Portal, Eleno Oviedo y Miguel Sigler Amaya.
Por otro lado, también estaban presentes Ana Carbonell, Jefa de Despacho del legislador Lincoln Díaz-Balart, Yolanda Huerga, Dama de Blanco, Laida Carro, de la Coalición de Mujeres Cubano Americanas, Aramis L. Pérez, del Directorio Democrático Cubano, Mauricio Clavel Carone, del Grupo Lobista en Washington, y el escritor Armando de Armas.
El grupo, configurado por personalidades de los diversos estadios de arribo al exilio, provenientes de diferentes metodologías de enfrentamiento al régimen cubano y de disímiles ideas políticas, coincidieron en la necesidad de mantener, y de ser posible incrementar, sanciones a la dictadura en un momento que se vislumbra como el más débil en su medio siglo de existencia.
Así, también coincidieron en la importancia de mantener la ayuda a los grupos disidentes y de la sociedad civil dentro de la Isla, y de poner en manos de los grupos independientes teléfonos celulares, computadoras y toda tecnología que contribuya a la información y a romper el bloqueo al libre flujo de las ideas que mantiene la dictadura sobre el pueblo cubano.
Mark Begich, 38 años, fue alcalde de Anchorage, y antes de alcalde sirvió por diez años en la legislatura de Anchorage. En 2008 resultó electo al Senado por Alaska, en una reñidísima elección en que se impuso al republicano Ted Stevens. La victoria de Mark Begich en Alaska aumentó a 58 la mayoría de los demócratas en el Senado de Estados Unidos y los acercó en ese momento a los 60 votos necesarios para evitar la denominada “táctica del filibusterismo” y dar mayor libertad de acción al presidente Barack Obama.
En el encuentro de Miami Beach Mark Begich se mostró receptivo, y en algunos casos conmovido, ante el testimonio de los cubanos exiliados y ante las sugerencias respecto a la política que ha de seguir Estados Unidos de cara al régimen de Cuba y a la oposición.
