por Armando Añel
Tiempo atrás, en entrevista que nos hiciera el escritor y periodista Luis de la Paz, nos referíamos a las tres direcciones fundamentales de trabajo por las que suponíamos que Cuba Inglesa (CI) había alcanzado un relativo éxito en ciertas zonas del ciberespacio cubano: entre estas tres direcciones mencionábamos la de la amenidad, “según la cual el lector tiene derecho a la recreación en nuestra página”.
Revolviendo la frase, esto del derecho a la recreación no resulta exclusivo de CI, ni siquiera en el ámbito cubiche. Así, por ejemplo, un blog como Crónicas de Nuevo Songo ha llevado a un nuevo nivel humorístico, o lúdico (a un nivel superior), tan sano modo de hacer y ser en la blogosfera, dándole la vuelta y reinventándolo desde Europa. De lo que podemos vanagloriarnos en C.I. Group --espacio que el Cronista de Nuevo Songo ocupa por derecho propio— es de recorrer un carril a la vanguardia de este estilo de blogueo, de hacer literatura. De redireccionar recreativamente nuestro calendario existencial.
“La vida es sueño y es juego”, dice Idamanda Rosael en Erótica, parafraseando a Calderón de la Barca. Partiendo de esta base, en la que creemos a pie juntillas, nos ronda la pregunta: ¿No debería constituir la recreación un derecho de todos los cubanos, de todos los humanos? ¿Acaso no puede llegar a convertirse el sujeto onírico entrevisto por Rosael en el sepulturero del hombre nuevo que pretendiera –y algunos aseguran ha logrado—engendrar el castrismo?
Tiempo atrás, en entrevista que nos hiciera el escritor y periodista Luis de la Paz, nos referíamos a las tres direcciones fundamentales de trabajo por las que suponíamos que Cuba Inglesa (CI) había alcanzado un relativo éxito en ciertas zonas del ciberespacio cubano: entre estas tres direcciones mencionábamos la de la amenidad, “según la cual el lector tiene derecho a la recreación en nuestra página”.
Revolviendo la frase, esto del derecho a la recreación no resulta exclusivo de CI, ni siquiera en el ámbito cubiche. Así, por ejemplo, un blog como Crónicas de Nuevo Songo ha llevado a un nuevo nivel humorístico, o lúdico (a un nivel superior), tan sano modo de hacer y ser en la blogosfera, dándole la vuelta y reinventándolo desde Europa. De lo que podemos vanagloriarnos en C.I. Group --espacio que el Cronista de Nuevo Songo ocupa por derecho propio— es de recorrer un carril a la vanguardia de este estilo de blogueo, de hacer literatura. De redireccionar recreativamente nuestro calendario existencial.
“La vida es sueño y es juego”, dice Idamanda Rosael en Erótica, parafraseando a Calderón de la Barca. Partiendo de esta base, en la que creemos a pie juntillas, nos ronda la pregunta: ¿No debería constituir la recreación un derecho de todos los cubanos, de todos los humanos? ¿Acaso no puede llegar a convertirse el sujeto onírico entrevisto por Rosael en el sepulturero del hombre nuevo que pretendiera –y algunos aseguran ha logrado—engendrar el castrismo?