Sí, me ha pasado conocer a gente que da por hecho que el éxito te cayó del cielo. Hay gente que llega aquí y piensa que eso que llaman “Sueño Americano” es algo que se puede conseguir de manera instantánea, como si fuera un café. La verdad es que eso toma tiempo. Pero no es sólo una cuestión de tiempo, es una cuestión de trabajar disciplinadamente, con un propósito claro, con preparación para ese propósito, con la habilidad y la generosidad de colaborar, de contactar con otra gente; es, además, la pasión que uno pone a favor de ese sueño para resistir los golpes, para volverse uno a parar después de la decepción de una caída. Y de otra y de otra. A mí no me ha sido fácil lograr nada, todo lo contrario.
Busque usted las historias de los cubanos que han triunfado en el mundo corporativo. Desde Goizueta en Coca-Cola hasta Ralph de la Vega en AT&T, son historias de saber vencer precisamente por saber utilizar los obstáculos como impulso para salir adelante. Es esa energía la que uno desearía ofrecer en un futuro en Cuba.
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Daisy Expósito-Ulla entrevista por Armando de Armas para Martí Noticias