Entre los casos más prometedores a los que debieron enfrentarse Sherlock Holmes y su inseparable asistente Watson, figura sin dudas el misterioso caso de la Cloaca del Pantano.
El caso irresuelto de la Convocatoria Fantasma (prorrogado por el famoso detective), que llamara a tocar cazuelas en Cuba como forma de protesta contra el injusto orden de cosas imperante en esa isla, había aparecido primero en una controvertida web de la blogosfera cubana. Pero el editor de ese blog, envuelto en un arduo cruce de acusaciones y correos desvelados, había declinado la autoría. De manera que Holmes y su leal ayudante, que no paraba de llamarle la atención sobre la intrascendencia del enredo en el que se habían metido, debieron conformarse con explorar otras alternativas.
Todo parecía indicar que la convocatoria había partido de Cuba, donde una célebre bloguera, muy conocida internacionalmente, había pasado a la acción. Pero cuál no sería la decepción del detective inglés al descubrir, con un rictus de cansancio cruzándole la boca, que tampoco era ella la autora intelectual del cacerolazo. Fue entonces que vino en su ayuda un chispazo de la suerte, la súbita aparición del blog más estrambótico que hubiera enfrentado Holmes en toda su carrera: La Cloaca del Pantano.
A la Cloaca del Pantano iba a parar todo, y de la Cloaca del Pantano brotaba todo reciclado. Así que bastaba con echarse a un lado y contemplar lo que allí entraba y salía. De manera que ambos ingleses desenfundaron sus respectivas lupas y se dispusieron a observar. Tarde o temprano iba a aparecer, desde lo más profundo de la cloaca, la solución del caso más misterioso que hubieran enfrentado. El misterioso caso de la Convocatoria Fantasma se llamaba ahora el misterioso caso de la Cloaca del Pantano. Solucionarlo era cuestión de tiempo.
Nota de la Redacción:
Sherlock Holmes: Casos Pendientes es una sección abierta que firman diversos autores. Los invitamos a participar con sus crónicas detectivescas. Gracias.