De cara al Mundial de Fútbol de Sudáfrica, España acude por primera vez como favorita, junto a Brasil y los incombustibles italianos. España, campeona europea, con el medio campo tal vez más creativo del momento, a remolque de defensas precisos y competitivos –fijos en el Barca y el Real Madrid—, con dos de sus delanteros entre los diez mejores del mundo. Un equipo que ha aprendido a jugar de memoria. La coronación en Europa ha dado carácter al once inicial. Un plus que los españoles han echado en falta durante décadas.
En el vídeo, amistoso de la semana pasada, España derrota a Francia como quien manda un campamento.